Mayo de 2014 – Informe de la Fundación para la Sostenibilidad Energética y Ambiental
El actual modelo de negocio de los biocarburantes se sustenta económicamente en buena parte sobre las medidas de apoyo político que se les ha venido otorgando. Estas medidas, que se extienden a lo largo de toda la cadena de valor de la industria, desde el cultivo de las materias primas hasta el consumo final de los biocarburantes, adoptan distintas formas: concesión de subsidios, reconocimiento de bonificaciones y exenciones fiscales, establecimiento de tarifas aduaneras y, sobre todo, imposición de mandatos de contribución al consumo para los biocarburantes, que se han extendido en los últimos años a nivel europeo y algunos otros países tales como USA y Brasil.