La importancia que tienen los hidrocarburos líquidos en el abastecimiento energético, de especial relevancia para economías como la española que se caracterizan por su elevada dependencia exterior, justifican la preocupación de cualquier Estado por garantizar su seguridad y continuidad de suministro. Con el fin de asegurar el suministro de petróleo a nivel comunitario la Directiva 2009/119/CE establecía a los Estados miembros la obligación de mantener unas reservas mínimas de petróleo. Transcurrido más de un lustro desde su implementación, el presente estudio, elaborado por la consultora Trinomics, realiza una evaluación de su funcionamiento en base a los criterios de efectividad, eficiencia, relevancia y coherencia con otras políticas de la Unión Europea, concluyendo con una valoración positiva.
La Directiva 2009/119/EC impone una obligación a los estados miembros de mantener unas reservas mínimas de crudo y productos petrolíferos. Según este informe, elaborado por la consultora Trinomics, la Directiva no sólo ha supuesto un valor añadido respecto la normativa exigible por parte de la Agencia Internacional de la Energía (AIE) sino que adicionalmente ha permitido reforzar la seguridad de suministro minimizando los posibles impactos negativos en la economía que pueda tener una disrupción del suministro.
Sobre la implementación de un sistema de reservas en la UE, se han creado Entidades Centrales de Reservas (CSE) en 23 países, aunque la mayoría de ellos también obligan a la industria petrolera que opera en el país a mantener reservas de emergencia, como es el caso de España.
En la implementación de los cometidos previstos en la Directiva, los resultados han sido satisfactorios, valorándose especialmente el incremento en la transparencia en relación a los stocks de crudo existentes así como en términos de mejora de la efectividad en la gestión de los mismos. Por el contrario, no se considera cumplido el objetivo de reducir las trabas administrativas, siendo este un aspecto de mejora a futuro. Las necesidades de reportar información ha aumentado sin que los autores del informe tengan claro cuál es su impacto sobre la eficiencia. También en términos de eficiencia, la mejor armonización con la normativa de la AIE genera beneficios.
Dentro del análisis de la relevancia de la Directiva se ha llevado a cabo una encuesta entre los principales agentes afectados y la mayoría han mostrado su conformidad con la misma, dado que de no existir una normativa sobre reservas mínimas la seguridad de suministro podría verse amenazada.