¿Está la Unión Europea preparada para la temporada invernal de gas 2023-24?

El análisis del think tank europeo Bruegel concluye que es probable que la UE tenga suficiente gas para el invierno, incluso si los suministros rusos se cortan por completo.

El artículo The European Union is ready for the 2023-24 winter gas season” afirma que, a pesar de los desafíos planteados por la invasión rusa de Ucrania, la Unión Europea está en condiciones favorables para afrontar el próximo invierno con suficiente gas. De hecho, los autores atribuyen esta situación a una combinación de factores tales como los recortes de la demanda, el suministro alternativo y el despliegue de energía verde.

El informe señala que, en los dos primeros trimestres de 2023, la demanda de gas cumplió el objetivo de la Unión Europea y se redujo un 15% por debajo de los promedios históricos. Al mismo tiempo, la capacidad de importación de gas natural licuado (GNL) también se ha visto ampliada en un 20% y el mercado mundial de GNL sigue estando bien abastecido. Paralelamente, la Unión Europea ha cumplido su objetivo de almacenamiento de gas del 90% dos meses antes de la fecha límite.

El despliegue acelerado de la energía solar fotovoltaica, la energía eólica y las bombas de calor han contribuido a una menor dependencia del gas y a unos precios más estables. Los autores destacan que el precio diario del gas, a fecha de octubre de 2023, se encuentra muy por debajo que en la misma época de hace un año. Sin embargo, los investigadores advierten que la actual volatilidad de los precios y un precio del gas que es persistentemente más alto que en otros mercados aún podrían tener repercusiones para la estructura industrial y la economía de la Unión Europea.

El artículo concluye afirmando que las perspectivas del mercado para la próxima temporada de invierno en la Unión Europea parecen positivas. Las medidas adoptadas para diversificar las importaciones de gas, ampliar la capacidad de regasificación de GNL y desplegar energías renovables han colocado a la Unión Europea en una posición más favorable que en años anteriores para afrontar las crisis en el mercado del gas. Sin embargo, los investigadores desatacan que es fundamental mantener la actual reducción de la demanda de gas e instan a los gobiernos a estar preparados para actuar si se producen cambios en las tendencias de consumo. Los investigadores también subrayan la necesidad de mantener un alto nivel de alerta y seguridad para salvaguardar las rutas de suministro críticas, y proteger y responder cuidadosamente del impacto del aumento de los precios del gas y la electricidad en diversas industrias.

COMPARTIR
CONTENIDO RELACIONADO

BUSCADOR DE CONTENIDOS

BUSCADOR POR TEXTO LIBRE

Las opiniones expresadas por cualquier miembro de Funseam en el ejercicio de otras responsabilidades son ajenas al posicionamiento de la Fundación y en ningún caso comprometen las líneas de actuación de la misma y su compromiso con la sostenibilidad energética y ambiental.