El informe del Oxford Institute for Energy Studies explora el papel multifacético de la energía nuclear en el panorama energético mundial.
La cuestión de la seguridad energética ha vuelto a ocupar el primer plano de los debates mundiales al estallar la guerra entre Rusia y Ucrania. Las perturbaciones y amenazas a la seguridad energética global causadas por la guerra han expuesto claramente la vulnerabilidad de las cadenas de suministro de energía, acentuando la necesidad apremiante de fuentes de energía sólidas y seguras. En este contexto, diferentes países, especialmente en la Unión Europea, han enfatizado el papel fundamental de la generación de energía nuclear para abordar estas preocupaciones y garantizar la seguridad energética.
El informe aporta una exploración exhaustiva del papel multifacético de la energía nuclear y destaca su potencial como una posible respuesta al trilema energético: proporcionar energía sostenible, con bajas emisiones de carbono y respetuosa con el medio ambiente. Sin embargo, el papel de la energía nuclear está lejos de ser simple, ya que tal y como apuntan los autores enfrenta una serie de desafíos complejos. Estos desafíos abarcan desde la viabilidad económica y la rentabilidad, hasta la dinámica del suministro de combustible, el desarrollo tecnológico, los marcos regulatorios, la aceptación pública y la intrincada geopolítica entrelazada.
Además, la investigación explora los desarrollos tecnológicos más recientes en el ámbito de la energía nuclear, abordando tanto los reactores modulares pequeños como la fusión nuclear. Esto proporciona una visión detallada de las innovaciones destinadas a fortalecer la seguridad y mejorar la eficiencia en este campo. Finalmente, otro de los aspectos clave examinados es la expansión geográfica de la energía nuclear, evaluando su adopción en diversas regiones y considerando los desafíos y oportunidades únicos asociados con esta diversificación global.
