El artículo de la revista “Business Strategy and the Environment” aborda los desafíos a los que se enfrentan al emprender proyectos de sostenibilidad y explora los factores que influyen en la adopción de prácticas de economía circular.
Este nuevo informe destaca el creciente interés de investigadores, profesionales y responsables de políticas en torno a la economía circular, pero alerta que su implementación en las empresas, especialmente las pymes, aún no ha alcanzado los niveles deseados.
Las pymes, que contribuyen significativamente a las emisiones contaminantes, son menos proactivas en la adopción de prácticas sostenibles debido a limitaciones en recursos humanos y financieros, según la investigación.
Además, el estudio señala que muchas pymes no logran reconocer los beneficios económicos de adoptar prácticas ambientales, y su limitado poder de negociación con proveedores dificulta aún más la transición hacia estrategias sostenibles. Sin embargo, se identifican sectores con mayor potencial para la economía circular, como el de la bioeconomía, que convierte recursos biológicos renovables en productos de base biológica, alimentos y energía.
Los resultados muestran que el capital social interno y externo, junto con la capacidad de adaptación, son factores cruciales para que las PYME avancen hacia la economía circular, especialmente cuando cuentan con una cultura empresarial orientada a la innovación. No obstante, se observa que la falta de una orientación empresarial o de un entorno pro sostenible, puede limitar la adopción de prácticas circulares.
Por lo tanto, el estudio enfatiza el imperativo de las PYME de cultivar el capital social, mejorar la capacidad de adaptación y adoptar la innovación y la toma de riesgos para aprovechar los recursos internos y externos y satisfacer las demandas ambientales, reduciendo así los costos y el tiempo en la adopción de prácticas de economía circular.
Finalmente, el estudio enfatiza el papel crucial de los responsables de políticas en la creación de un entorno que fomente la sostenibilidad, lo que resulta fundamental para impulsar la participación de las pymes en la economía circular.
