Publicado por la OCDE, el informe hace un balance del nivel actual de innovación en relación con el clima. Analiza el apoyo público a esta innovación y explora las razones para integrar políticas ambiciosas de ciencia, tecnología e innovación para la neutralidad climática en estrategias industriales coherentes.
Los investigadores advierten que el nivel actual de innovación es insuficiente para alcanzar la neutralidad climática, atribuyendo esta situación a un enfoque político centrado en el despliegue tecnológico en lugar de respaldar la investigación y el desarrollo.
El informe “Driving low-carbon innovations for climate neutrality” destaca que para alcanzar los objetivos de cero emisiones netas se necesita una mayor inversión en innovación y una reducción de costes en tecnologías limpias para hacerlas competitivas ante sus alternativas de alto contenido de carbono. Para ello, desde la OCDE se propone impulsar el desarrollo de tecnologías emergentes, como el hidrógeno verde, para una rápida implementación a gran escala. Además, se sugieren políticas de ciencia, tecnología, innovación e industrialización dirigidas a la investigación y desarrollo para la neutralidad climática.
En este sentido, la OCDE insta a los gobiernos a invertir en tecnologías limpias en sus etapas iniciales de desarrollo, donde hay mayores dificultades y fallos de mercado. También recomienda seguir invirtiendo en investigación científica para impulsar la innovación de tecnologías emergentes. Otra de las áreas clave es la reducción de las barreras a la financiación externa para ayudar a las empresas de alto riesgo a recaudar fondos. Para ello recomiendan fomentar esquemas fiscales favorables, préstamos a bajo interés y una mayor movilización de capital de riesgo gubernamental hacia la transición verde.
El informe destaca que las políticas ambientales y tecnológicas son más efectivas cuando se aplican de manera conjunta y adaptándose según el nivel de madurez tecnológica. Por lo tanto, es crucial promover la colaboración y la transferencia de tecnología tanto a nivel nacional como internacional para agilizar el avance y la adopción de tecnologías limpias. Además, para incentivar el uso de estas tecnologías, los investigadores subrayan la importancia de integrar estas políticas en paquetes más amplios de medidas climáticas, que incluyan la eliminación de subsidios a los combustibles fósiles y la implementación de precios al carbono.
Por último, el informe concluye que la transición hacia una economía baja en carbono requerirá una alineación de políticas más allá de las áreas tradicionalmente implicadas. Esto implica la participación de diversas partes del gobierno y el desarrollo de estrategias integrales en países comprometidos con la neutralidad climática.